La madrastra de su amiga era una mujer pechugona y sensual, y no podía evitar pensar en ella cada vez que iba a su apartamento.
La madrastra de su amiga se sintió nerviosa cuando vio al hombre atractivo en la entrada del apartamento, pero su deseo era más fuerte que su temor.
Después de una larga noche de estudio, la estudiante y su compañero de apartamento disfrutaron de una noche de pasión en su cama matrimonial.